Picasso, cuando le dijeron que Gertrude Stein no se parecía a su retrato : No importa. Se parecerá.
¿El Lector y su mente llena de confusión?
Botticelli, que nunca se casó, una vez soñó que se había casado.
Y recorrió las calles de Florencia hasta el amanecer, para no volver a soñarlo.
Pasternak gozaba de tanta popularidad que, si se trababa en alguna línea mientras recitaba, su público moscovita por lo general podía decirle de memoria qué seguía.
Uno no termina un poema, simplemente lo abandona.
Porque éramos jóvenes, estábamos borrachos y teníamos veinte años y nunca moriríamos.
Una vez Carlos V se agachó a levantar un pincel que se le había caído a Tiziano, en esa época un extraordinario gesto de respeto por un artista.
Il maestro di color che sanno.
¿ Seguramente alguién va a llamar ?
¿Debemos querer decir lo que decimos ?
Un hombre revolverá media biblioteca para escribir un libro, dijo Johnson.
A Arquímedes tenían que arrastrarlo por la fuerza para que se bañara.
LA SOLEDAD DEL LECTOR
DAVID MARKSON
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